sábado, 26 de marzo de 2022

Neurobiología: Epilepsia e hiper religiosidad


Incógnito: Las vidas secretas del cerebro
David Eagleman

 (…) Y no olvide que la larga lista de cosas que influyen en su vida mental va más allá de las sustancias químicas, y también incluye los detalles del circuito. Consideremos la epilepsia. Si un ataque epiléptico se centra en un benigno lugar concreto del lóbulo temporal, una persona no tendrá ataques motores, sino algo más sutil. El efecto es una especie de ataque cognitivo, marcado por cambios de personalidad, hiper religiosidad (una obsesión con la religión y una sensación de certeza religiosa), hipergrafía (escribir extensamente sobre un tema, generalmente la religión), la falsa sensación de una presencia externa y, a menudo, oír voces que se atribuyen a Dios. Al parecer, una parte de los profetas, mártires y líderes de la historia padecieron epilepsia del lóbulo temporal. Pensemos en Juana de Arco, la muchacha de dieciséis años que consiguió darle la vuelta a la guerra de los Cien Años porque creía (y convenció de ello a los soldados franceses) que oía la voz del arcángel San Miguel, de Santa Catalina de Alejandría, de Santa Margarita y de San Gabriel. Así es como ella describió la experiencia:

«Cuando tenía trece años, oía la voz de Dios, que me decía cómo tenía que obrar. La primera vez me quedé aterrada. La voz me llegó a eso del mediodía: era verano, y estaba en el jardín de mi padre.» Posteriormente afirmó: «Puesto que Dios me ha ordenado que vaya, debo ir. Y puesto que Dios me lo ha ordenado, aunque hubiera tenido cien padres y cien madres, y hubiera sido la hija de un rey, habría ido.» Aunque es imposible diagnosticar con certeza de manera retrospectiva, sus palabras, el aumento de su religiosidad y las voces que oía son síntomas coherentes con la epilepsia del lóbulo temporal. Cuando surge actividad cerebral en el sitio adecuado, la gente oye voces. Si el médico receta una medicación antiepiléptica, los ataques desaparecen y las voces dejan de oírse. Nuestra realidad depende de nuestra biología.

 

Nota de pie de página

Véase Trimble y Freeman, «An investigation», para estudios de la religiosidad en pacientes con epilepsia del lóbulo temporal, y Devinsky y Lai, «Spirituality», para una visión general de la epilepsia y la religiosidad. Véase d’Orsi y Tinuper, «“I heard voices”», para la opinión de que la epilepsia de Juana de Arco era de un tipo descubierto hace poco: la epilepsia parcial idiopática con rasgos auditivos. Véase Freemon, «A differential diagnosis», para un diagnóstico histórico de Mahoma en el que concluye: «Aunque es imposible un diagnóstico terminante a partir del conocimiento existente, los ataques parciales complejos o psicomotores de epilepsia de lóbulo temporal serían el diagnóstico más defendible.»

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